Un nuevo plan
Cuando sus súplicas quedaron sin respuesta, Zac se dio cuenta de que hacía falta una nueva estrategia. “¿Cómo puedo entrar?”, se preguntó, inspeccionando cada centímetro del exterior del recinto. Vio un pequeño acceso de mantenimiento en la parte trasera, pero estaba bien cerrado. Decidido, empezó a buscar cualquier cosa que pudiera pasar desapercibida, como una ventana abierta o un panel suelto.

Un nuevo plan
La suerte le favorece
Justo cuando Zac estaba a punto de perderse, vio un conducto de ventilación entreabierto por una rama rebelde. “Quizá quepa por ahí”, se preguntó en voz alta. Apartó la rama y examinó la entrada. Parecía lo bastante grande como para que pudiera colarse por ella si era precavido. Sin más opciones, decidió intentarlo.

La suerte le favorece